La avenida principal obtuvo su nombre actual el 20 de noviembre de 1932, anteriormente fue llamada calle Olvera, Libertad, A. y Obregón. Llamada por los locales como “La Revu”, fue una de las primeras vialidades que contó con servicios públicos y ha presenciado la evolución de esta ciudad desde el primer día

Por Mariana Sánchez

Tengo la creencia que los tijuanenses evitamos la Zona Centro a toda costa, especialmente los fines de semana para evitar pasar tiempo en el tráfico; sin embargo, la Avenida Revolución está más viva que nunca, y ahora es el momento perfecto para turistas en nuestra ciudad.

La avenida principal, el corazón de Tijuana en mi opinión, obtuvo su nombre actual el 20 de noviembre de 1932, anteriormente fue llamada calle Olvera, Libertad, A. y Obregón. Llamada por los locales como “La Revu”, fue una de las primeras vialidades que contó con servicios públicos como electricidad y pavimentación, y ha presenciado la evolución de esta ciudad desde el primer día.

Las reliquias de “La Revu”

Aquí y allá se pueden observar rastros de cómo creció la ciudad desde el Centro hacia las afueras, y encontramos reliquias de lo que un día fue como en la fachada del Soriana antes el Hotel Comercial, el banco HSBC antes la Comercializadora de Baja California, y The Beer Garden antes el Foreigner Club.

En este último, en esquina de la calle 3era y Revolución se fundó en 1924 como casino, restaurante y cabaret, y mi parte favorita es a un costado, el Pasaje Rodríguez. Su función era conectar como vía alterna a otras calles, los diversos establecimientos del Foreigner Clubs para los clientes y huéspedes, por ello dentro de este pasaje se puede encontrar el emblema de color dorado con las iniciales “FC”, rindiendo honor a dicho lugar de entretenimiento. Ahora es un corredor cultural y comercial en el cual puedes disfrutar el arte de sus murales, diversos negocios de cerveza, comida y café, tiendas de ropa y accesorios, librerías, incluso, una obra en Teatro Valentina.

Los pasajes

Al terminar la Primera Guerra Mundial y comenzando la década de los 20’s, las ciudades fronterizas de México comenzaron a recibir mayor inversión económica, lo cual cimentó su crecimiento.

Una de las principales razones fue la prohibición de producción y venta de alcohol en los Estados Unidos de América, conocida como la Ley Volstead, Tijuana floreció con restaurantes, cantinas y centros de espectáculos, y los pasajes (se dice que llegaron a ser hasta 12) proporcionaron opciones de comercio y entretenimiento para los visitantes.

Hoy en día, los pasajes son espacios populares para disfrutar de gran comida y bebidas, y apoyar a pequeños comerciantes, además de que nos brindan la oportunidad de conocer a artistas emergentes y emprendedores que están reviviendo estos espacios con tanta historia para nuestra comunidad. ¿Qué pasaje te vas animar a descubrir (o redescubrir) próximamente?

La autora es Lic.en Negocios Internacionales y creadora de Nana en Tijuana.

@nanaentijuana