“Una variedad de molestias gastrointestinales, como eructos, hinchazón, dolor abdominal y flatulencia, se atribuyen comúnmente al ‘exceso de gases’”

Redacción Salud actual
A veces, son ruidosos, otras silenciosos; en ocasiones, pueden ser francamente ofensivos. Estamos hablando de los pedos, también conocidos como flatulencias, gases y vientos. Para la mayoría, son una pequeña molestia de la vida cotidiana. Pero para algunos, pueden parecer como si en realidad pudieran ser tóxicos.
“Una variedad de molestias gastrointestinales, como eructos, hinchazón, dolor abdominal y flatulencia, se atribuyen comúnmente al ‘exceso de gases’”, dijo la Dra. Alissa Speziale, gastroenteróloga certificada por la junta de Sharp Rees-Stealy. “Aunque el paso excesivo de gases o su mal olor puede ser una fuente de vergüenza para el paciente, rara vez se asocia con una enfermedad grave”.
Según la Dra. Speziale, el volumen de gas expulsado por persona varía de aproximadamente 500 a 1500 mililitros por día. La frecuencia de liberación de gases es de entre 10 y 20 veces al día en personas sanas.
Cuando se produce demasiado gas intestinal, dijo que puede deberse a una deglución excesiva de aire, a una mala absorción de nutrientes en el intestino, a una obstrucción o disfunción en la eliminación de gases o a una expansión de gases en el estómago o el intestino debido a cambios en la presión atmosférica.
¿Qué los provoca?
Leche y productos lácteos, verduras como espárragos, brócoli, coles de Bruselas, repollo, coliflor, apio, maíz, pepino, colinabo, puerros, cebollas, chirivías, papas, rábanos, colinabos y nabos, frutas como manzanas, albaricoques, plátanos, melocotones, peras, ciruelas pasas y pasas, así como algunos granos integrales, legumbres, edulcorantes artificiales y chicles.
Prevén los gases intestinales
Si bien evitar los alimentos y bebidas mencionados anteriormente ayudará a reducir los gases, el Dr. Speziale también recomiendó:
- Reducir la cantidad de aire que tragas evitando masticar chicle, fumar, beber bebidas carbonatadas y consumir alimentos y líquidos.
- Utiliza un sustituto de la enzima lactasa (Lactaid) si tienes intolerancia a la lactosa.
- Tome subsalicilato de bismuto (Pepto Bismol) según sea necesario; sin embargo, el uso a largo plazo puede provocar toxicidad, por lo que debes usarlo solo de vez en cuando y según lo recomendado por tu médico.