Es preciso perseverar desde nuestro centro y tener claros nuestros objetivos, de lo contrario, podemos quedar atrapados en círculos viciosos de acción sin propósito. La perseverancia no debe convertirse en una exigencia desgastante que nos aleje de nuestro verdadero camino

Por Adriana Reid

Recuerda que la propuesta de esta serie es invitarte a generar el hábito de cuestionar, reinterpretar y explorar los usos y costumbres de las palabras, frases o dichos populares que le han y le dan significado a nuestras experiencias. La frase que elegí para este mes de julio es: «el que persevera, alcanza».

Desde tiempos inmemoriales, los refranes han sido una parte integral de la sabiduría popular, transmitiendo lecciones valiosas y consejos prácticos de generación en generación. Aunque estos pequeños fragmentos de sabiduría encapsulan verdades universales y pueden ofrecer una guía para navegar las complejidades de la vida, también pueden generar una predisposición que asume significados y bloquea el discernimiento.

Te invito a generar nuevas perspectivas a la hora de resignificar y adaptar tu lenguaje a tus circunstancias actuales, lo cual implica no solo comprender su mensaje original, sino también reinterpretarlo de manera que tenga relevancia y resonancia en tu día a día.

 

«El que persevera, alcanza»

En el contexto de la salud mental, este refrán destaca la importancia de la disciplina y la constancia en la búsqueda de nuestro bienestar. La disciplina en nuestras acciones diarias, como levantarse temprano, hacer ejercicio físico, meditar, etc., puede tener un impacto positivo significativo en nuestro bienestar emocional.

Esta perseverancia en prácticas de bienestar construye una base sólida que nos ayuda a enfrentar el día a día desde el espectador, con una mentalidad más tranquila y centrada. Hacerlo, comienza a generar un espacio entre las circunstancias y nuestras reacciones, lo que reduce la ansiedad y el estrés.

Considera la importancia de la disciplina y la constancia en tus rutinas alineadas con tus objetivos.

La modernidad nos bombardea con expectativas externas, y es fácil perder de vista nuestros propios valores en la búsqueda de obtener lo que creemos que necesitamos del mundo que nos rodea, esto provoca una distorsión en el significado de nuestros objetivos.

Recuerda “Se vale lo que tú quieras con la condición de que sepas por qué lo quieres” -porque, a fin de cuentas, nosotros nos haremos cargo de las consecuencias.

Para tu caja de herramientas: 

Responde las siguientes preguntas:

¿Están mis acciones diarias alineadas con lo que realmente es importante para mí? ¿Dedico tiempo a prácticas que nutren mi mente, cuerpo y espíritu, o estoy atrapado en una rutina que busca únicamente la aprobación externa?

 

Perseverar desde nuestro centro

Es preciso perseverar desde nuestro centro y tener claros nuestros objetivos, de lo contrario, podemos quedar atrapados en círculos viciosos de acción sin propósito. La perseverancia no debe convertirse en una exigencia desgastante que nos aleje de nuestro verdadero camino. 

¿Cómo hacerlo? Haz un par de inhalaciones profundas. Recuerda que cualquier emoción disminuye su intensidad con información y oxígeno. Al inhalar de manera consciente, generamos un espacio entre la circunstancia y nuestra reacción.

Activa tus cinco sentidos al mismo tiempo: Así como estás, activa tu sentido del tacto, siente tu cuerpo sobre la silla, las sensaciones de la ropa en tu piel; activa tu sentido del oído, escucha ruidos y sonidos a tu alrededor; levanta tu mirada de este escrito y observa, huele y saborea. Y en todo momento, date cuenta que tú eres quien está activando tus cinco sentidos. Esta práctica te regresa a tu centro, a tu momento presente. Desde aquí elabora una lista de valores y principios y haz tu lista de prioridades.

Te propongo hacer una lista de tus valores y principios que sirvan como ancla y motivación para tus acciones diarias. Solo así, la perseverancia te llevará al crecimiento y a la realización, y no al agotamiento y la frustración.

Si sientes que luchar con tus emociones, no dudes en buscar ayuda profesional. Si deseas explorar más sobre este tema, quieres proponer algún refrán o unirte a nuestra lista de distribución, escríbenos a info@be2be-coaching.com con el asunto: «Quiero suscribirme/julio2024» 

 

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