La botella Magnum resulta una opción eficiente respecto de la huella de carbono, ya que con el doble de cantidad de vino de una botella de 750 ml, en el caso de la magnum se está usando una sola botella, un solo corcho, una sola cápsula y una sola etiqueta, datos importantes en la producción y el desecho de las mismas
Por Ana Laura Martínez
Dentro de las tendencias del mundo del vino, hoy se habla de la importancia del recipiente que contiene el vino, llámese botella, lata, tetra pack y sus bondades de la misma manera que los grandes formatos de botella como lo es la botella Magnum, especialmente.
Si bien la clásica y convencional botella es de 750 ml, es sabido que el vino evoluciona mejor en las botellas de mayor calibre y algo que hoy es relevante también es el impacto sobre el medio ambiente que produce el desechar una botella, o bien, producirla, así como el corcho, etiqueta, cápsula. El origen del vino por supuesto que importa y el envase que lo contiene es “sine qua non”.
Actualmente hay tiendas de vino en lugares aficionados al vino como Reino Unido en donde las únicas presentaciones para el vino son las botellas de gran formato.
¿Qué es lo que pasa en estas botellas “grandes”?
Que hay una relación vino-aire, en donde el oxígeno- que sabemos es el principal enemigo del vino- es poco, lo que permite que el vino evolucione mejor con los años, ya que el tener el doble del volumen y un espacio en el cuello de la botella similar al convencional (750 ml), hay una mayor protección del preciado líquido.
Ojo, en esta relación vino-aire, no necesariamente más será mejor, es decir, que por ejemplo las botellas Magnum son mejores que las doble magnum, ya que la botella y el corcho de la de 1.5 litro es prácticamente del mismo tamaño que las de 750 ml, esto cambia a partir de los 3 litros, así que si pudiéramos decir cuál es la mejor relación vino-aire, sin duda la MAGNUM es la ganadora.
También la botella Magnum resulta una opción eficiente respecto de la huella de carbono, ya que con el doble de cantidad de vino de una botella de 750 ml, en el caso de la magnum se está usando una sola botella, un solo corcho, una sola cápsula y una sola etiqueta, datos importantes en la producción y el desecho de las mismas.
La nomenclatura
Existe una nomenclatura para referirse al tamaño de las botellas:
Piccolo o Split 187.5 ml aproximadamente una copa
Media botella 375 ml
Estándar 750 ml la más común
Magnum 1.5 lt equivalente a 2 botellas estándar de 750 ml
Jeroboam 3 lt equivalente a 2 botellas Magnum ó 4 botellas de 750 ml
Rehoboam 4.5 lt equivalente a 6 botellas estándar de 750 ml
Matusalem 6 lt equivalente a 8 botellas estándar de 750 ml
Salmanazar 9 lt equivalente a 12 botellas estándar de 750 ml
Baltasar 12 lt equivalente a 18 botellas estándar de 750 ml
Nabucodonosor 15 lt equivalente a 20 botellas estándar de 750 ml
Melchor o Solomon 18 lt equivalente a 24 botellas estándar de 750 ml
Sovereign 25 lt equivalente a 33 botellas estándar de 750 ml
Primat 27 lt equivalente a 36 botellas estándar de 750 ml
Melquiades 30 lt equivalente a 40 botellas estándar de 750 ml
De las más usadas
La botella Magnum es una de las más usadas después de la tradicional y este término de origen latino significa grande. Las primeras botellas magnum aparecieron a finales del siglo XIX.
Además de la relación vino-aire y la huella de carbón, una botella Magnum es un excelente regalo que transforma una celebración en algo extraordinario. Y es recomendable cuando el número de invitados lo amerita, que no te intimide comprar una botella Magnum para tu siguiente celebración.
De nuestros valles tenemos vinos como el Mariatinto y Mariatinto natural; de Adobe de Guadalupe, Rafael y Jardín Secreto, Dubacano, Duoma, Symmetria, Vino de Piedra, Hilo Negro zigzag, Hilo Negro Escala, Bruma rosé, Solar Fortún Elixir Cordis, el Gran Ricardo de Monte Xanic, el Boheme de Henri Lurton, Nerone de Paoloni que vienen en botella Magnum, lo único es que se agotan muy rápido, lo que indica que cada vez más los consumidores buscamos esta presentación.
