“Ojalá que todos supieran de esta enfermedad, porque hay cantidad de gente enferma de esto; el padecimiento es silencioso, de la noche a la mañana aparece y cuando te enteras ya es demasiado tarde; en mi caso, los riñones se me hicieron como pasitas”

Por Mónica Márquez

Desde hace 15 años, María Eugenia Lozano Carbonell es una fiel colaboradora de Mujer Actual, una mujer que ha tocado la vida de muchos con su espíritu alegre y su gran corazón. Conocida por su inigualable carisma, ha dedicado una parte importante de su vida a la enseñanza del inglés, convirtiéndose en una figura querida y respetada por sus numerosos estudiantes.

Hoy, Maru Lozano, como muchos la llamamos con cariño, enfrenta un duro desafío de salud. Esta difícil prueba, lejos de apagar su luz, ha demostrado una vez más la grandeza de su corazón. El apoyo y el cariño que ha recibido son un claro reflejo de lo que ha sembrado a lo largo de su trayectoria profesional: una vida dedicada a dar, a enseñar y a tocar los corazones de quienes la rodean.

Maru es originaria de la Ciudad de México, aunque desde hace 35 años reside en Tijuana. Ella es licenciada en Educación y psicoterapeuta humanista gestalt; ha participado como columnista en diversos medios de comunicación.

“Cuando llegué a Tijuana quería trabajar para no aburrirme, pero solo tenía estudios de preparatoria y secretariado. Me metí a dar clases en una escuela secretarial en el Centro, pero no me gustó cómo estaba y abrí una, se llamaba Instituto San Rafael, en el cual formábamos secretarias bilingües. Me fue muy bien, sin embargo, esa figura secretarial acabó muy pronto”, relató.

Posteriormente, se dedicó a brindar el curso secretarial en diversas empresas de la ciudad. Luego se unió a la fila de docentes de la Ibero para dar clases de inglés.

“Dar clases me encantó y fue cuando decidí estudiar en línea la licenciatura en Educación, a la par que estudié psicoterapia humanista gestalt. Salgo de la Ibero porque no tenía título y me toman en la prepa Lázaro Cárdenas para dar clases, también iba a la UTT y, a la par, atendía a mis hijos Daniela e Ignacio”, recordó.

Más tarde, estuvo en UABC como supervisora académica de lenguas durante 9 años y luego en el Instituto Colinas.

 

Llega la enfermedad

Maru se encontraba dando clases en el Instituto Colinas, cuando en octubre de 2024 su salud empezó a mermar al ser diagnosticada con neumonía. En febrero ya no se pudo levantar, sus pulmones se llenaron de agua debido a una falla renal.

“Yo decía, por qué no puedo hablar, por qué no me puedo levantar, parecía pez globo porque estaba super inflamada. Iba por mis incapacidades y el médico que me toca está en un pequeño consultorio dentro del hipódromo y él me pidió una biometría hemática y química sanguínea y ahí salió que mis riñones funcionaban en un 5% y al mes cayó al 2%.

“El IMSS te dice que lo primero es la diálisis peritoneal, pero si ya tienes una cirugía previa, no eres candidata. Tuve que ir con el internista y el nefrólogo y ellos dijeron que no era candidata, que siguiera con la hemodiálisis, pero estoy en lista de espera porque está muy lleno”, recordó.

Los gastos por este tipo de enfermedad son muy altos, por lo que su hija Daniela creó una página en GoFundMe para recibir donaciones. “Fue conmovedor porque el 80% de las personas que me donaron fueron compañeras de hace 40 años de la escuela donde estudié en México, lo demás fue de mis alumnos, ex alumnos, amigos…

“Cuando vi el movimiento de gente, me encontraba en un momento en el que la enfermedad no me dejaba pensar, pero mi hija me empezó a leer los mensajes y yo lloraba y lloraba. Fue muy conmovedor”, compartió.

 

En espera de un riñón

Debido a su enfermedad renal aguda, Maru requiere de un trasplante de riñón, por lo que empezó con el protocolo, las pruebas a sus hijos, pero los resultados no fueron lo esperados. Actualmente, se encuentra a la espera de un trasplante cadavérico por medio del IMSS.

“Estoy a la par de todas mis citas y te dicen que tienes que súper cuidarte porque en el momento en que haya un riñón debo estar bien de salud.

“Ojalá que todos supieran de esta enfermedad, porque hay cantidad de gente enferma de esto; el padecimiento es silencioso, de la noche a la mañana aparece y cuando te enteras ya es demasiado tarde; en mi caso, los riñones se me hicieron como pasitas”, consideró.

Maru aconsejó llevar una buena alimentación y moderar el consumo de sal, ya que esta es perjudicial para los riñones. En su situación, al no existir antecedentes de diabetes o alguna otra enfermedad contribuyente, la falla renal se atribuyó a su alimentación. “Si pudiera regresar el tiempo no fumaría y comería con más conciencia”.

 

Sus hijos, su principal motor

Esta experiencia de salud definitivamente ha impactado su vida física y emocionalmente. “Dejé de tener sentido, no encontraba el sentido de mi vida hasta que me di cuenta que para mis hijos soy muy importante. Ellos me decían: mamá, échale ganas, te necesitamos… El saber que para ellos era muy importante, me repuntó, me volvió a levantar. También me ayudó a seleccionar qué es lo bueno que debería leer, escuchar…  Bajas la guardia en todos los sentidos”, compartió.

Hoy, Maru lo que más disfruta es a su nieta María José y a su familia, compartir tiempo con ellas y brindarles todo su cariño.

 

En breve

Artículo indispensable: su Ipad

Libro favorito: Exhala de Gaby Vargas

Mayor debilidad: la paciencia

Mayor fortaleza: su empatía

Frase favorita: “Ponerse en el lugar del prójimo”

 

Para donaciones pueden acceder a la plataforma www.gofundme.com/es-mex y buscar la página de recaudación “Trasplante de riñón para Maru”; cada aportación será destinada a sus análisis, gastos médicos y cirugía.

Espera un momento…

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