«El cáncer no define quién eres, solo revela tu fuerza; hoy, estoy aquí para recordarte que la vida merece ser celebrada»

Por Mónica Márquez
Hoy tenemos el honor de conocer la historia de Celia Ruiz Murillo, una mujer excepcional que ha demostrado una gran fortaleza y resiliencia en su experiencia con el cáncer. Con más de 23 años de trayectoria en la educación, Celia ha creado centros educativos que van más allá de lo académico, formando seres humanos con valores sólidos y listos para afrontar el futuro.

¿En qué momento de tu vida te encontrabas cuando te dieron la noticia que tenías cáncer?

Estaba en un momento muy especial de mi vida, mi hijo menor estaba a punto de casarse. Me diagnosticaron en mayo de 2024 y él se casó en agosto. La idea de no poder estar presente en ese momento tan importante me llenó de tristeza. Fue un momento de emociones encontradas: alegría y celebración por un lado, y desafío y crecimiento por otro.

¿Cómo te enteraste que tenías cáncer de mama?

Estaba en Guadalajara en la despedida de soltera de mi nuera, y durante mi meditación matutina, descubrí una anomalía en mi pecho. Inmediatamente busqué atención médica y me diagnosticaron cáncer de mama. Fue un momento de sorpresa y miedo, pero también de agradecimiento por la detección temprana.

¿Consideras que tu familia fue una parte fundamental en este proceso?

Sí, mi familia ha sido mi apoyo incondicional. Todavía recuerdo cuando mis hijos me tomaban de la mano y me decían: ‘Mamá, esto va a pasar’. En ese momento, reclamaba y decía: ‘¿Por qué a mí?’ Pero luego me di cuenta de que era un ‘para qué’ y no un ‘por qué’.

¿Qué respuestas recibiste? ¿Qué misión crees que tienes ahora?

Recibí mucho cariño y amor, y comprendí que debía disfrutar de la vida. Mi misión ahora es vivir con propósito, enseñar con el ejemplo, inspirar y apoyar a otras mujeres que están pasando por una situación similar. Quiero acompañarlas en su proceso y mostrarles que hay esperanza a través del poder y amor de Dios.

¿Cuál consideras que ha sido el mayor desafío durante el proceso?

Soportar el dolor y pasar por múltiples revisiones. Detenerme y confiar en los tratamientos fue difícil para mí, ya que soy una mujer activa y emprendedora. Me costó trabajo aceptar que necesitaba poner una pausa y enfocarme en mi salud.

¿Qué te ayudó a mantener la paz y la actitud positiva?

La fe en Dios, el amor y el apoyo de mi familia y amigos. También la resiliencia y la determinación para superar este desafío.

¿Ahora cómo celebras tus logros y tus victorias?

Celebro cada logro con gratitud y alegría. Celebro cada día de mi vida y doy gracias a Dios por la vida y por la oportunidad de compartirla con mis seres queridos. Cada paso hacia la salud es un regalo y una victoria.

Un mensaje para las mujeres que están pasando por una enfermedad.

Quiero decirte que ‘No estás sola. Confía en ti misma, en tu fuerza y en el proceso que estás viviendo. Rodéate de personas positivas y busca apoyo médico y emocional. El cáncer no es una sentencia de muerte, es una oportunidad para crecer y renacer con más amor y volver a vivir. Con fe, disciplina y esperanza, podrás renacer y volver con más sabiduría y amor a la vida’.

Espera un momento…

0