El éxito es una palabra codiciada y muy seductora. ¿Quién no quiere ser exitoso?

Por Becky Krinsky

Todos estamos en busca del éxito, dedicamos la vida entera por hacer todo lo posible para alcanzarlo y, además, aseguramos que mientras no lo tengamos, no seremos felices.
La triste realidad es que muchos ni siquiera pueden describir que es el éxito, por lo que su búsqueda se hace más complicada, hasta podría ser en vano. Como no se sabe qué se quiere, tampoco se puede describir, entender y mucho menos reconocer.
Estamos en una búsqueda de algo que no se conoce, quizá ya se tiene y que posiblemente no se le reconoce por lo que no se le puede valorar.
El éxito es algo más que tener lindas palabras de reflexión, o frases de motivación, o tener mucho dinero y fama. El éxito viene acompañado de dedicación, disciplina, determinación, esfuerzo, fracasos y muchas levantadas. Se logra con compromiso y una actitud positiva y con el reconocimiento que la vida es bella y que vale la pena luchar por lo que uno desea. El éxito es personal y no hay que compararlo con otros.
La palabra éxito tiene su raíz del latín “exitus” que significa: final o término. Se puede entender que, como el latín lo describe se refiere a todo lo que pone fin a una carencia o un sufrimiento, este término se ha sofisticado y no solo se refiere a lo que se termina, sino a lo que se ha conseguido no por carencia sino por abundancia.

Reflexiones acerca del éxito

Hay una connotación personal de que el éxito es un logro personal que alude al esfuerzo, el trabajo y hasta a la suerte que cada persona tiene. Hay una connotación social que al hablar del éxito se está describiendo los valores sociales aceptados y valorados por la comunidad.
Establecer la historia del éxito personal bajo la definición y los estándares de otros, se convierte en un conflicto de expectativas que confunden el éxito que se desea con el éxito que otros valoran.
El éxito es la definición personal que se establece en función a los objetivos, valores, talentos y oportunidades de cada uno. Este es un logro personal que no requiere reconocimiento de nadie, ya que la satisfacción por haber alcanzado la meta es suficiente para poder sentir satisfacción.

El éxito y los objetivos

REFLEXIÓN DE VIDA
A pesar de que establecer objetivos es un factor crucial para alcanzar el éxito, estos proporcionan un mapa que ofrece dirección, tiempos y calidad para ejecución, igualmente y a la inversa, el establecer objetivos se puede convertir en su propia limitante.
Un objetivo establece un límite concreto, un logro y un resultado claro. Este objetivo se puede valorar y cuantificar fácil, se logró: ÉXITO. ¿Si no se logró entonces será fracaso, pérdida o adversidad? O bien podría ser un límite impuesto que obstaculiza lograr más ya que por estar el pendiente objetivo la visión se limita y se descuida la posibilidad de poderlo superar, multiplicar o lograr algo mejor.

LA RECETA

EL ÉXITO

Ingredientes

  • Paciencia – Fortaleza para dar el tiempo que el esfuerzo florezca
  • Disciplina Práctica continua, esfuerzo, mente clara
  • Compromiso – Determinación personal e integra para luchar
  • Motivación – Inspiración, pasión y pensamientos positivos
  • Confianza – Amor propio, seguridad y visión panorámica con astucia

AFIRMACIÓN PERSONAL

Mi éxito es mío. Depende de mis sueños, mis talentos y mis posibilidades. El éxito no me define ni me limita, ni me pone un valor. El éxito solo me marca el mapa para encontrar mi camino y reconocer mis posibilidades para desarrollarlo. Busco inspiración y fortalezco mi dedicación cuando la necesito. Con el éxito me comprometo conmigo mismo para ser mejor y cada día superar aquello que creía que ya había logrado. Vivo en armonía. Busco mi excelencia. Creo en mí y me esfuerzo por ser mi mejor versión.

 

QUE SE PUEDE APRENDER DEL ÉXITO

El ÉXITO se mide con la perseverancia y la humildad personal. Cuando se obtiene el triunfo después de tanto esfuerzo y trabajo, el éxito se disfruta y se valora mucho más ya que la lucha personal y la satisfacción lograda son en sí la mejor recompensa.
El éxito no tiene fecha de expiración. Los esfuerzos realizados se acumulan y se multiplican, nunca se desperdician. Todas las acciones cuentan y en su preciso momento, el resultado, generalmente sobrepasa las expectativas esperadas.
El éxito es la suma de los refuerzos, los talentos, las oportunidades y la capacidad personal para poder unir y aprovechar lo que uno tiene. Un éxito sostenible y real, no se mide en función a que otros valoran o necesitan. El éxito es un tema personal que solo describe al esfuerzo y la dedicación individual.
Vivir con el éxito que se logra por medio del esfuerzo personal, desarrollando los talentos y venciendo los límites impuestos, es sin duda vivir una vida plena, una buena vida.

Espera un momento…

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